Tratamiento endovenoso para evitar operaciones cardiovasculares. Recupera la elasticidad de la pared arterial y aumenta de esta forma la luz arterial. Remueve metales pesados y calcio para excretarlos por vía urinarias y bilis. De esta forma incrementa la oxigenación de los tejidos y mejora la situación vascular en general. Es útil para tratar la arterioesclerosis, insuficiencia cerebro-vascular, osteoporosis, claudicación intermitente y muchas otras patologías de tipo degenerativo o de las que aparecen con la senilidad. Previamente al tratamiento se realiza un estudio médico completo, y posteriormente se establece la dosificación y el número de sesiones en cada caso. Este tratamiento se combina con la oxigenoterapia endovenosa para mejorar los trastornos tróficos y en casos en los que previamente haya recibido el paciente, quimioterapia o radioterapia, minimiza los efectos secundarios. A la vez estos tratamientos se acompaña de un programa de ejercicios y nutrición, que conlleva supresión del tabaco y cambio en los hábitos de vida. Los efectos secundarios durante el tratamiento son mínimos como cefalea, hipotensión o hipoglucemia.
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